Con las vías democráticas canceladas, en México sacar a MORENA sin duda no pasa por elecciones limpias y tranquilas en las que el partido en el poder reconoce que perdió los comicios.
En Venezuela Chávez fue derrotado por Capriles… fue derrotado por María Corina… Maduro por Augusto.
En la más reciente elección ni siquiera se preocuparon por disimular el fraude, simplemente escondieron las actas electorales y luego sacaron a las «autoridades electorales» para anunciar una victoria clara del dictador.
¿Cómo se logra eso?
Sencillo: Solamente hay que desaparecer a los organismos electorales y reemplazarlos por empleados… hay que apoderarse del Poder Judicial y los tribunales electorales.
Entonces veremos los primeros resultados luego de apoderarse de todo…
En Veracruz, el corazón del crimen organizado que se ubica en Poza Rica, significó una dolorosa derrota para MORENA.
El régimen no podía darse el lujo de que la zona más redituable de la región se les fuera de las manos por simple prurito democrático.
Así que se robó la elección…
Sin embargo, el enojo ciudadano que ya era alto, se disparó luego del criminal olvido de las autoridades morenistas tras los desastres de las recientes lluvias.
La presidente fue acosada… le reclamaron en su cara… la acusaron de ser tapadera.
La señora ya vio el rostro del enojo ciudadano… enojo que puede seguir e impedir que la alcaldesita impuesta por medio del fraude, tome posesión del cargo.
Y para ello no se ha necesitado a partido alguno, porque en ese específico caso, los ciudadanos se impusieron y trascendieron.
Los partidos fueron rebasados… la presidente fue rebasada, por un pueblo que no necesita vías institucionales para imponerse.
Pasamos de la democracia partidista, a la democracia popular.
