CONTRA LO QUE PUDIERA SUPONERSE, LA SITUACIÓN en Reynosa tras la captura de Tormenta Jr no se complicó, a diferencia del momento en que ocurrió la captura de su padre, que paralizó a la fronteriza con violentos enfrentamientos y estallidos de violencia por toda la franja.
En realidad, la captura tuvo que ver con una extraña actitud y actividad de los hediondos a cargo de la marca criminal que dirigía el heredero.
Por alguna razón o quizá por aviso, los encargados de la custodia del maleante se retiraron, y los cuerpos de seguridad encargados de su captura simplemente no estaban cuando el operativo llegó hasta el criminal.
Hasta ahora no hay alerta de violencia extrema, aunque la ventana de seguridad no se amplía, sigue hasta las 11 de la mañana…
ALGO INTERESANTE ES QUE LAS RAMIFICACIONES de ese grupo criminal llegan hasta Nuevo León, aunque ahora en el mundo criminal circulan versiones de que precisamente desde Nuevo León se realizaron actividades sospechosas para que el maleante quedara a merced de las fuerzas especiales.
Hasta ahora, repito, no se han dado reacciones en contra de quienes queden etiquetados como traidores.
La situación sigue tensa, pero más que en otros días,