HEDIONDOS DE POCA MONTA, HAMBREADOS por dinero inmediato, se manifiestan en la metrópoli.
Ayer se metieron en una vivienda del fraccionamiento Los Fresnos en Apodaca, y en vez de buscar cajas fuertes o dinero escondido, exigieron dinero de las billeteras de los moradores de la vivienda.
Verá usted, el perfil de quienes habitan por allá es medio-medio… nada de florituras.
Así que los hediondos después de evadir a todo y todos, salieron de la casa con muy poco botín para esconderse o para presumir.
Son como el grupo de la carretera a Nuevo Laredo, de quienes alertamos ayer, y tal como lo dijimos, reaparecieron.
Ocupan dinero para mantener su estatus de vida.
PERO DONDE NO HAY POCA MONTA es por la carretera 57 y en el sur de Nuevo León.
Cuerpos dejados en la carretera, inmigrantes centroamericanos sin duda, que envían mensaje para los cuerpos de seguridad… «Aquí estamos».
El hediondaje cuando no trae poder de fuego usa el poder de la comunicación.
Insisto en que esas dos zonas requiere de mucho trabajo de Inteligencia, y hasta ahora no se ve.
