LAS COSAS EN RAYONES Y EN TODA LA REGIÓN CITRÍCOLA tiene un alto componente criminal-político-electoral.
La aparición del cártel que sale a defender a la 4T y que alguna vez lo hizo de manera directa, con una producción propia de Epigmenio Ibarra, a favor de López Obrador, cuando salió a desmentir al líder de los Ardillos, quien aseguraba que los zetas pagaron la campaña de López en el 2006, tiene muchos aspectos por analizar.
Uno, atacan una base de los jaliscos… una base que nunca fue tocada por la autoridad estatal, una base que solamente fue sacudida cuando los golfos hicieron una incursión armada y persiguieron a varios operadores de los jaliscos.
Pero luego las cosas regresaron a su estatus inicial.
EL TEMA ES QUE ALGUNOS OBSERVADORES DE LOS MENSAJES DE Inteligencia, señalan que todo esto tiene visos de apuntar hacia el 2027.
¿La elección para gobernador?
Los jaliscos ya no parecían dispuestos a operar a favor de MORENA y muchos creyeron que iban a desviar sus votos o su operación a favor de la actual autoridad.
Entonces decidieron que no iban a permitirlo.
¿Tan solo eso?… ¿Y el huachicol?
¡Esa es otra historia!, pero en este caso, es evitar una operación en contra… por eso mandaron al cártel amigo.
Porque desde acá le iban a incumplir al Peje la promesa de operar a favor de MORENA en el 27.
Política y crimen… un coctel que deja consecuencias como las de Rayones.
