LAS EMPRESAS CONSTRUCTORAS QUE TRABAJAN EN la obra de la Interserrana, allá en municipios del sur del estado, ya no encuentran la puerta de salida, a causa de la inseguridad.
Ahora son dos los grupos quienes les exigen el pago de piso para no sufrir ataques.
De nada sirve que le paguen a uno, porque ese grupo no les ayudará a defenderse del otro grupo que anda metido en dicha zona.
Hay comunidades en donde los hediondos volvieron a cobrar piso… ¡en domicilios particulares!
Llegan a cobrar el derecho de vivir en paz en sus casas y de que nada pase a sus hijos o hijas.
Por eso, de acuerdo con García Harfush, Nuevo León está en tercer lugar en denuncias por extorsión, en la modalidad de cobro de piso.
AHORA SÍ, YA DIO FUERZA CIVIL CON UNA ZONA DE ALTO RIESGO, que se encuentra en ese rombo que se forma desde Cadereyta hasta Cerralvo-Herreras, y algunas poblaciones aledañas al Valle de las Salinas, como Zuazua, Marín-Higueras.
Los cobradores en retenes de huachicol, los que realizaban maniobras o tareas complementarias y recibían diversas cantidades por esa actividad, andan desesperados y no buscan integrarse a la vida productiva en alguna de las muchas ramas del empleo que reclaman personal en la metrópoli.
Tienen armas y tienen la suficiente cobardía para echarse en bola contra gente trabajadora.
Ya comenzaron extorsiones o asaltos en las horas de salida de la refinería… en Cadereyta le cobran piso hasta a la señora que vende vasitos de avena en uno de los accesos a la instalación petrolera.
Fuerza Civil ya anda por allá… espero que se quede hasta que saque del lugar a estos miserables apestosos.
