ALGUNOS JEFES MALANDROS de Reynosa tienen en operación a hediondos que se mueven en la zona de General Terán y Hualahuises.
Pero el tema del manejo financiero y la urgencia de liquidez provoca que deban enviar cada semana a personas de su confianza a recoger cientos de miles de pesos a esos municipios.
La operación es de venta de droga en puntos determinados.
Así que el tema de cobrar se volvió vital y la situación parece propicia para cometer traiciones de todo tipo.