Tuvo que venir la Federación a decirles que hay Fiscal… que deben coordinarse… que las policías municipales y las estatales trabajan juntas, o se van a su casa.
El resultado de entrada no es malo…
La inseguridad no se terminó, pero ahora sí hay oportunidad de pegarle a los maleantes.
Alguien, o algunos debieron morderse una gónada, porque de manera natural no se quieren.
Bueno…
¿Cuándo se van a morder la otra?
Veamos:
Samuel no tiene dinero para terminar sus obras; los constructores no le creen y por ello no reactivan.
Los alcaldes no tienen dinero para tapar los baches y realizar obras, porque Samuel no les manda recuersos.
Los ciudadanos sufrimos a diario los baches… sufrimos los drenajes abiertos por todos lados… la falta de camiones urbanos… el estrangulamiento de las calles por las obras paradas.
Pero no se arreglan porque no se quieren.
Y la verdad a mi me vale madre si se quieren o no… lo que me interesa es que los baches se tapen, que se terminen las obras, que lleguen más camiones ¡y circular por estas atascadas avenidas!
¿Cómo se arregla todo?
Sencillo: Con un presupuesto que a Samuel le permita obtener deuda para pagarle a los constructores.
Con un presupuesto en el que Samuel le entregue a los alcaldes recursos para sus obras.
Con un presupuesto que permita a los ladrones de Agua y Drenaje dedicar 3 mil millones a rehabilitar ¡ya! la red del drenaje.
Es sencillo: Solo se necesita un presupuesto.
Es nuestro dinero el que se va a usar… la deuda la cargamos nosotros… ¡ya!
¿Esperan a que venga otra vez la Federación para morderse la gónada que les hace falta?
Si no se la muerden ellos mismos… se las va a morder la perra…
La perra desesperación de los ciudadanos.