POR LA MAÑANA, CUANDO ya solo faltaba poner el sello de compromiso para un acuerdo de «dando y dando» entre el PRI-PAN y MC-MORENA, para que por un lado se autorizara a Ivonne Álvarez y a Rafa Ramos dejar el Congreso y llamar a sus suplentes, e integrarse al gobierno de Adrián de la Garza, y por otro lado, se tomará protesta a Gestapo Carlos Mendoza, como consejero de la Judicatura, ocurrió algo.
TOMMY MOTOLA, alias Tomás Montoya dio un giro a las cosas… ¡se negó a tomar como rehenes a Ivonne y a Rafa!
Os explico…
El Tommy, ahora diputado de MORENA, es el presidente de la Comisión de Gobernación, responsable de transitar dichas solicitudes de licencia.
Ayer su coordinador de bancada, Mario Bebé Oso Soto Esquer, le instruyó para detener el procedimiento y dejar en el aire la autorización de licencia… hasta que el PRI y el PAN aceptaran tomarle protesta a Gestapo Carlos Mendoza.
EL BLOQUE OPOSITOR se negaba a tomarle protesta como respuesta a la persecución que Gestapo desató contra diputadas y diputados del PRI en la anterior legislatura…
Recordad que Alhinna Vargas hasta el hospital fue a dar…
Así que ahora no había más remedio que entregar cada quien a sus rehenes… por parte de MC y MORENA autorizar las licencias de Ivonne y Rafa; y por parte del PRI-PAN, tomarle protesta a Gestapo Carlos Mendoza.
FUE CUANDO TOMMY MONTOYA dio golpe en la mesa y dijo… ¡basta!, me niego a tomar como rehenes a Ivonne y Rafa, y su argumento central fue… «Si ustedes se lo hacen a ellos, al rato la van a cobrar igual cuando algunos de aquí soliciten licencia».
¡A temblar!
Aquí fue donde el Mike Flores operó durísimo, agarró por su cuenta a Bebé Oso y le pidió que aguantara… ¡que aguantara!
Bebé Oso aguantó con los dientes apretados y sostuvo a Montoya para que no arrancara la sesión de Gobernación hasta que quedara sellado el pacto.
Fueron minutos intensos y vitales.
Al final todos contentos…
PERO ALGO QUE RECONOCIERON los morenistas es que Mike Flores ya aprendió a no pedir tonterías ni caprichitos.
Solamente pide cuando vale la pena, dicen…
Y ayer valió la pena.
