Un tipo venía caminando por un camino entre el monte, cuando sintió ganas de tirar la piedra.
Pensó que alcanzaría a llegar al pueblo, pero el deseo de tirar la piedra era apremiante, así que buscó la manera, sin embargo, de cuando en cuanto pasaban algunas personas.
Así que lo único que se le ocurrió fue trepar a un árbol, acuclillarse en una rama y tirar desde ahí.
Pasaron dos lugareños y vieron que algo caía…
-Mire compadre, recina…
-¡Achinga!… ¿resina?… se ve muy aguada.
-Sí compa… ha de ser por eso que dicen del calentamiento global… ya ve que se cambia mucho eso de la naturaleza.
En eso uno voltea para arriba y ve el trasero del tipo…
-¡Aijuelashingada compadre!… mire nomás… ¡Qué enorme socavón!… el calentamiento derritió el nido de la pájara…
-¡Y los huevos se pudrieron!…
-¡Me cai que no güelvo a tirar basura al río!
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En una escuela de la colonia Moderna, la maestra pregunta a los niños a dónde fueron de vacaciones navideñas.
Pedrito dice…
-Yo fui a casa de mis tíos a pasar la navidad, en Houston… y vi muchos edificios muy altos, y un estadio bien enorme que no olía a miados.
-Ah muy bien… ¿Y tú Luisito?
-Yo estuve en Monterrey… y fui a ver Luztopía… y mi papá dijo muchas maldiciones cuando vio el precio…
-Ah, muy bien… ¿Y tú Pepito?
-Fui con mis abuelos al rancho que tienen en Terán… y vi que tenía dos vacas vacas, una blanca y otra negra… y un toro… el toro vino el primer día, y se cogió a la vaca blanca…
-¡Pepito!… no se dice así… se dice sorprendió.
-¡Ah!… perdón… bueno, al otro día… el toro sorprendió a la vaca negra.
-¡Muy bien!… así se dice…
-No, digo que sorprendió a la vaca negra… ¡Porque se volvió a enchufar a la vaca blanca!
