López empoderó a un cártel a un nivel nunca antes visto.
El Mencho y Andrés Manuel se hermanaron.
Mientras el mundo conoce los horrores de un campo de exterminio operado por el cártel que dirige el Mencho, en México dista mucho de ser el criminal más buscado.
Mientras en México las madres buscadoras claman por justicia, el gobierno al que ellas pagan impuestos mira para otro lado.
No solamente no es buscado; no solamente siembra terror.
Además se pavonea… se exhibe en un concierto de berreadores de música bélica, con su efigie en todo el escenario.
Y el público idiota lo ovaciona.
Esa es la herencia de López, la herencia del Presidente que hizo historia.
Él sí se levantaba pensando cómo joder a México.